Un estudio revela el peligro del tráfico marítimo para los delfines
PATAGONIA NORTE. Según la investigación, el movimiento de la industria acuícola constituye uno de los mayores riesgos. En Intesal trabajan en una plataforma de avistamientos y de información.
Un estudio elaborado por el Programa Austral Patagonia, de la Universidad Austral de Chile, identificó la amenaza a la que están expuestas tres especies de cetáceos en la Patagonia norte, a causa del tráfico marítimo que tiene lugar en este sector.
La investigación identificó 18 zonas en las que los delfines chilenos, austral y marsopa conviven diariamente con este inconveniente, el que está asociado a la industria acuícola. Además, establece que de las 18 zonas, 14 corresponden a áreas protegidas.
Uno de los autores del estudio que analizó un área de 70 mil kilómetros cuadrados, entre Puerto Montt y la Laguna San Rafael (Región de Aysén), es Francisco Viddi, biólogo marino e investigador asociado del Programa Austral Patagonia y quien ante la próxima discusión de la ley de acuicultura señala que los cetáceos son un componente de gran importancia en los ecosistemas marinos.
"Son indicadores de buena salud de los hábitats. Por tanto, ciertos cambios en distribución y abundancia de este grupo de animales son una señal de que algo pasa. Con esto, la ley debería considerar y relevar las áreas de importancia (o áreas núcleo) para estas especies (y claramente para otras), antes de que sean usadas para la acuicultura", señaló.
En su análisis, señala que "ciertamente, en ciertos estudios de impacto ambiental, se considera presencia y ausencia de algunas especies, pero lastimosamente las técnicas y escalas usadas (temporal y espacial) no son las adecuadas. No basta con decir que en un momento determinado 'no hay delfines', sino que se requiere usar la información disponible de bases de datos, análisis e interpretaciones robustas".
Explicó que la identificación de áreas de riesgo, como el informado por el estudio, debería considerarse en aspectos claves de los planes de manejo de las áreas protegidas, así como los de contingencia y mitigación de la industria.
Al respecto, señala que la contaminación acústica (causada por motores de embarcaciones y de generadores), la velocidad y el tamaño de las embarcaciones son todos aspectos a considerar ante el crecimiento de la industria del salmón y que causan impactos en los cetáceos. "Por otro lado, hay un aspecto, a mí parecer poco visibilizado, que es la cantidad de basura flotante y en las playas que lastimosamente nadie se está haciendo cargo. Estudios muestran que esta se genera principalmente de las actividades acuícolas", sostiene el experto.
En efecto, de acuerdo a la investigación, las rutas de navegación de embarcaciones, las operaciones industriales, y los hábitats utilizados por estas especies implican un mayor riesgo para estos animales, principalmente por la posibilidad de colisionar o interactuar de forma negativa con las embarcaciones.
En cuanto a las flotas, identifica que la que presenta la mayor densidad es la derivada de la industria de la acuicultura, registrándose hasta 729 embarcaciones activas en un día, equivalente al 83% del total de tráfico marítimo. También, pero en menor medida están las de la pesca, el transporte y el turismo.