Macron pospone su visita a Alemania por disturbios que dejan 1.311 detenidos
DESÓRDENES. Ayer Francia movilizaría 45 mil policías para enfrentar la quinta noche de violentos saqueos, el mismo día en que la víctima fatal del abuso policial que dio origen a las protestas, fue enterrado en una ceremonia privada.
El presidente francés, Emmanuel Macron, decidió ayer posponer su visita a Alemania que estaba programada para comenzar hoy, a consecuencia de los disturbios que atraviesa el país desde el martes tras la muerte de un joven a manos de la Policía, y que han proseguido con violentos saqueos . Sólo entre la noche del viernes y madrugada del sábado se registraron 1.311 detenciones, aunque la intensidad de los desórdenes ha bajado parcialmente, según las autoridades.
En un comunicado, el Elíseo anunció que la decisión se adoptó después de que ayer Macron mantuviera una conversación con su par alemán, Frank-Walter Steinmeier.
"Habida cuenta de la situación interna, el presidente de la República (Macron) ha indicado que deseaba poder quedarse en Francia estos próximos días. Los dos presidentes han convenido, por tanto, posponer la visita a Alemania para una fecha posterior", señalaron las fuentes en un escueto comunicado.
La noche del viernes también 79 policías resultaron heridos, según cifras del Ministerio del Interior, que detalló que hubo 1.350 vehículos incendiados y desperfectos en unos 234 edificios. Pese a la abultada cifra de arrestos, superior a la de las jornadas precedentes, las autoridades francesas evaluaron ayer que los incidentes fueron de menor intensidad que la noche precedente. "Gracias a la movilización de las fuerzas de seguridad interior en todo el país, el nivel las violencias cometidas anoche fue de menor intensidad la noche anterior", señaló la cartera en Twitter al comunicar el primer balance nocturno.
Funeral
El detonante de la ola de violencia fue la muerte de un joven de 17 años y ascendencia árabe llamado Nahel M., que recibió un disparo mortal de un policía cuando trataba de huir de un control policial en Nanterre.
El joven huyó porque no tenía licencia de conducir, había cometido infracciones y tenía antecedentes por la misma causa. El policía fue arrestado, suspendido y la fiscalía lo apnta por homicidio voluntario.
Las imágenes del incidente, grabadas por testigos, desataron una fuerte indignación en el país, lo que dio paso a disturbios sobre todo en los barrios populares de las grandes ciudades y en el cinturón metropolitano de París.
Los funerales del joven se realizaron la mañana de ayer en privado, ya que la familia precisó que quería una jornada de "discreción" y "recogimiento" y pidió que no acudiera prensa.
No obstante, igual se acercaron varias decenas de personas para mostrar su apoyo a la familia del joven.
45 mil policías
Francia se preparaba anoche para una quinta jornada de altercados nocturnos, para la que el Gobierno tenía presupuestado movilizar a 45.000 policías, aunque iba a enviar unidades antidisturbios de refuerzo a tres ciudades que sufrieron un empeoramiento de la violencia: Marsella, Lyon y Grenoble.
El ministro del Interior, Gérald Darmanin, anunció el dispositivo en unas declaraciones en las que advirtió de la "firmeza" del Estado contra los alborotadores y recalcó la advertencia a los padres para que controlen a sus hijos menores de edad.
"Hemos detenido a incendiarios de 12 o 13 años. Cuando se tiene 12 o 13 años, hay un trabajo incontestable de los padres", recalcó, antes de advertir que la policía y la fiscalía responsabilizarán a los padres por los daños que causen sus hijos menores de edad, "porque los hijos no estaban en su casa a esas horas de la madrugada".
"No hay nación sin orden", advirtió ayer el ministro de Economía francés, Bruno Le Maire, tras una reunión en París con comerciantes y hoteleros, a la vista de los destrozos y pérdidas económicas de los últimos días.