Colombia en vilo por revelaciones que prometió el hijo del presidente
JUDICIAL. Imputado por lavado de activos y enriquecimiento ilícito, Nicolás Petro debe colaborar hoy con la Justicia. Su padre pidió "fiscal ad hoc" para casos de familiares.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, pidió ayer designar un "fiscal ad hoc" que pueda liderar los casos judiciales que involucran a su familia, como el de su primogénito, Nicolás Petro Burgos, imputado por delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito.
En una carta entregada a la Corte Suprema de Justicia con motivo de la elección de la terna para el nuevo fiscal general, el jefe de Estado pidió: "En cuanto a las indagaciones o procesos penales que involucren a miembros de mi familia, les solicito que consideren la posibilidad de designar un fiscal ad-hoc para que no haya dudas respecto de la transparencia de estas".
Petro Burgos fue detenido el sábado pasado en Barranquilla junto con su exesposa, y posteriormente la Fiscalía le imputó los delitos de lavado de dinero y enriquecimiento ilícito luego de que un fiscal cuestionara su patrimonio.
Tras su detención, el mandatario aseguró que "no intervendrá ni presionará" las decisiones de la Fiscalía, aunque sin duda se encuentra en una situación difícil al ver sentado en el banquillo a su hijo.
A esto se añade que Petro Burgos confirmó este martes que colaborará con la Justicia para dar información sobre posibles irregularidades en campañas políticas, entre otros.
"Como persona y padre me duele mucho tanta autodestrucción y el que uno de mis hijos pase por la cárcel; como presidente de la República aseguro que la Fiscalía tenga todas las garantías de mi parte para proceder de acuerdo a la ley", expresó el mandatario en su cuenta de Twitter.
"A mi hijo le deseo suerte y fuerza. Que estos sucesos forjen su carácter y pueda reflexionar sobre sus propios errores. Como afirmé ante el fiscal general no intervendré ni presionaré sus decisiones; que el derecho guíe libremente el proceso", agregó el presidente colombiano tras la noticia.
Colombia en vilo
El alcance de la colaboración con la Justicia de Petro Burgos tiene en vilo al país, que espera conocer las revelaciones sobre casos de corrupción que el primogénito prometió hacer a la Fiscalía a partir de hoy.
La pregunta que se hacen hoy los colombianos es si Petro Burgos, quien según su exesposa, Daysuris Vásquez, también detenida, recibió dinero ilegal para la campaña presidencial de su padre, que finalmente nunca llegó a su destino pues lo utilizó en beneficio propio, prenderá el ventilador para contar lo que sabe sobre la financiación de campañas.
El hijo del presidente es diputado a la Asamblea del Atlántico, un departamento del norte de Colombia donde son frecuentes las denuncias de compra de votos en época de elecciones.
Petro Burgos, de 37 años, fue cuestionado por un fiscal que mostró que su patrimonio es a todas luces incompatible con sus ingresos como diputado regional.
Rebaja de pena
El financiamiento ilegal de campañas volvió a la discusión pública en junio pasado luego de que Armando Benedetti, entonces embajador en Venezuela que fue clave para el triunfo electoral de Petro en 2022 en la costa atlántica, amenazara con revelar lo que sabe de la financiación ilegal de esa campaña.
No se sabe si lo que Petro Burgos prometió revelar a la Fiscalía tiene relación con lo que dijo Benedetti, una duda que puede empezar a aclararse hoy cuando el hijo del presidente sea conducido a una nueva audiencia de la Fiscalía, con la que prometió colaborar a cambio de una rebaja de pena.
"Quiero anunciar a Colombia que hemos decidido iniciar un proceso de colaboración donde me referiré a nuevos hechos y situaciones que ayudarán a la Justicia. Lo hago por mi familia y por mi bebé que viene en camino", manifestó Petro Burgos en la audiencia de formalización del martes.
En medio del alboroto político, la Fiscalía negó haber infiltrado a un agente en el equipo de seguridad de Petro Burgos.