Fallece Pedro Bustamante, el creador de Cayenel y de la lancha Camahueto
PUERTO MONTT. El escultor, autor del Mascarón de Proa, ubicado al ingreso de Pelluco, falleció a los 89 años. Autoridades destacan su legado y reconocen que la ciudad quedó en deuda con el artista al no asignarle un lugar definitivo a Cayenel.
Redacción
A los 89 años falleció este miércoles el escultor puertomontino Pedro Bustamante, autor de emblemáticas obras de la ciudad, como la estatua del lonco Cayenel, la lancha chilota Camahueto -ubicada frente al Terminal de Buses- y el mascarón de Proa, emplazado en la entrada de Pelluco.
El reconocido escultor, que comenzó su carrera artística a los 12 años, está siendo velado en el Parque La Esperanza de Puerto Montt y sus funerales tendrán lugar a las 12 horas de hoy en el mismo recinto.
Trayectoria
El historiador Pablo Fábrega recordó que Bustamante, quien naciera en Puerto Montt un 19 de junio de 1934, se formó como autodidacta y tuvo como a uno de sus grandes modelos al pintor Manoly.
En su relato da cuenta que como antiguo vecino puertomontino vivió en las poblaciones Modelo, Arturo Prat y Aníbal Pinto, mientras que sus estudios los realizó en la actual Escuela N°2 Argentina, en el Colegio Arriarán Barros y terminó su enseñanza media en el Liceo de Hombres Manuel Montt.
Fábrega comenta que desde pequeño Bustamante sintió que su vocación estaba en el arte, específicamente en la pintura, pero debió emigrar a Santiago por algunos pocos años, donde estudió para ser laboratorista dental, lo que en esos años sólo lo ofrecían las clínicas privadas.
Ejerció su profesión en Puerto Montt entre los 23 y los 45 años. Sin embargo, nunca dejó de sentir que vocación por el arte era más fuerte y le angustiaba no poder desarrollarla. El historiador relató que en los años 60' trabajó con el dentista Jorge Cumming, en una antigua casa en calle Chillán 138. Ese inmueble sufrió un grave siniestro, pero él pudo repararlo e ir mejorándolo de a poco, lo que le permitió mostrar algunos muebles diseñados por él mismo.
Ante el éxito decidió crear la otrora "Fábrica de muebles Flix", donde llegó a dar trabajo a 15 personas y le permitió contar con suficiente tiempo como para por fin realizar su vocación.
Fue tanto su amor por el arte, sostiene el historiador, que en 1969 fundó y mantuvo por muchos años una de las primeras galerías de arte que conoció Puerto Montt, en las mismas oficinas de calle Chillán.
Añade que durante la administración del alcalde Héctor Miranda Ledermann (1 de junio de 1976 al 30 de abril de 1980), se concibieron y se realizaron la mayor parte de las más famosas obras escultóricas de Pedro Bustamante. Hasta esos años, Puerto Montt sólo contaba con bustos en honor a los héroes nacionales, pero no había ninguna obra de tamaño completo ni en recuerdo de personajes locales.
Deuda
Alejandro Bernales (PL), diputado integrante de la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados, reconoció en Bustamante a un "gran artista, a un gran escultor. Hace poco hablé con él por Cayenel, cuya ubicación constituye una deuda de la ciudad con él". Por lo mismo, señala Bernales, ahora sería un buen homenaje brindarle un lugar definitivo, en señal de homenaje para el escultor.
Ello, porque cuando la sacaron de la cuesta Ejército quedó sin una ubicación definitiva, por lo que es la oportunidad de brindarle un espacio. "Desde la Comisión de Cultura sus condolencias a sus seres queridos". En la misma línea, el presidente de la Comisión de Educación y Cultura del Concejo Municipal de Puerto Montt, Luis Vargas, destacó la trayectoria del artista. "En varias oportunidades hablamos de proyectos que pudieran ser impulsados por la municipalidad. Siempre nos recalcó su intención de seguir trabajando en su oficio".
Para Vargas, la tarea radica ahora en resguardar su legado y darlo a conocer a las nuevas generaciones, sobre todo a los estudiantes.
Al igual que Bernales, admite que existe una deuda, respecto a la ubicación de Cayenel, por lo que coincide con el diputado en que es el momento de buscarle un espacio definitivo, como una forma de "reconocer a nuestro escultor".
Las obras
Sobre sus obras, Fábrega recordó que Cayenel, "representa a uno de los muchos toquis que vivieron por estas tierras, aún cuando la existencia del mismo personaje no aparezca en ninguna fuente documental".
Comentó que otro de sus obras surgió cuando su amigo Jorge Lavín, director de Obras de la Municipalidad, le informó que estaban construyendo una plazoleta frente al recién construido Terminal de Buses en la costanera. En esos años eran muchas las lanchas chilotas que surcaban la bahía de Puerto Montt y queriendo rendirle un homenaje a esas embarcaciones que inspiraban a tantos artistas locales, decidió hacer una réplica con fierros encorvados cubierta de cemento. Y aunque su nombre -Camahueto-, surgió espontáneamente sin un autor reconocido, refleja el ímpetu de los cerros circundantes que claman por salir a la superficie y reclamar ese mar que se la ha quitado a la naturaleza con la costanera.
En cuanto al Mascarón de proa, que se encuentra en Pelluco, Bustamante "escuchó que el alcalde planeaba echar abajo un morro natural que había en la entrada del tradicional balneario, por lo que pidió un tiempo para presentarle un proyecto que permitiera salvarlo. Lo primero que dibujó fue un rostro de Vicente Pérez Rosales mirando para Puerto Montt y también propuso un lanchón que aprovechara las formas naturales del cerro".