A no perder el foco
María Paz Olavarría , Abogada, magíster en Derecho Privado y académica universitaria
Finalizado el debate en el Consejo Constitucional, luego de cumplirse cada una de las etapas establecidas en la Reforma Constitucional para llevar a efecto el proceso, como ciudadanos, debemos abocarnos a estar debidamente informados para poder emitir nuestro sufragio -con voto obligatorio- en el plebiscito del próximo 17 de diciembre de 2023.
Es por ello que, no obstante las opiniones personales y la posición que tengamos sobre el texto que se someterá al escrutinio de la ciudadanía, no debemos perder el foco, en cuanto a incentivar que las personas voten, de la forma que estimen, pero debidamente informadas, donde será clave evitar las lecturas o interpretaciones que algunos sectores quieran hacer o dar al texto en sí, dejando de rescatar elementos que si son importantes para que los electores tengan en consideración al emitir su sufragio -independientemente del contenido de la propuesta- como por ejemplo, la legitimidad de origen, que es uno de los aspectos más cuestionados de la Constitución vigente.
Si bien sabemos que el país está cansado y una parte importante mira con gran escepticismo el presente proceso constitucional, no se debe perder el foco en la necesidad de entregar la información de la manera más objetiva posible, para que los electores puedan emitir su voto de manera responsable, no obstante cual sea. Esta será la única forma de concluir un proceso constitucional que claramente pudo haber sido mucho más breve que lo que ha durado hasta ahora, desde el denominado "Acuerdo por la Paz Social y por la Nueva Constitución", suscrito el 15 de noviembre de 2019.
Teniendo presente lo anterior, e independientemente de lo que ocurrirá en el plebiscito de salida, hay que volver a conectar y estar en sintonía con los chilenos, abordando los reales problemas que nuestra ciudadanía clama por solucionar desde hace mucho tiempo, donde los temas de la agenda de seguridad siguen siendo prioritarios, ya que claramente es la gran preocupación y lo que genera más incertidumbre en la mayoría de chilenos. Por su parte, no se pueden seguir pasando por alto otros graves problemas existentes en nuestro país, como el tema migratorio, salud, vivienda, y recientemente, la crisis en educación a partir de lo que está ocurriendo en la Región de Atacama, que tiene a miles de niños y adolescentes sin clases, donde sin duda han existido reacciones tardías de quienes están a cargo de la toma de decisiones.
El llamado hoy es que más allá de las posiciones políticas de un sector u otro, no se debe perder el foco en las principales necesidades de nuestro país, y sea cual sea el resultado del plebiscito en el mes de diciembre próximo, el proceso constitucional debe cerrarse, porque claramente, la ciudadanía está cansada. Insistir con lo mismo, demostraría una absoluta y total desconexión con el país.