En las calles de Puerto Montt, donde el sonido de la lluvia es un eco constante, se ha encendido una luz de esperanza pero a la vez de preocupación. El anuncio por parte de la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH) del Ministerio de Obras Públicas de la actualización del Plan Maestro de Evacuación y Drenaje de Aguas Lluvias resuena como una necesidad imperante, una respuesta tardía a una actualización que lleva dos décadas sin resolver. La buena noticia, aunque matizada por la realidad burocrática, es que finalmente se reconoce la importancia de abordar este tema. El tejido urbano de la ciudad ha cambiado y aumentado, sin embargo, el plan que debería protegernos no ha evolucionado acorde a estas transformaciones.
La preocupación se intensifica cuando se examina el cronograma propuesto para actualizar el Plan Maestro de Aguas Lluvias. El levantamiento de información es solo el primer paso de una odisea que abarca la obtención de RS (recomendación favorable) de diseño y ejecución, diseño y ejecución propiamente tal; y finalmente la ejecución de los proyectos.
Con esto, nos enfrentamos a la cruda realidad de esperar al menos cinco años para ver una mejora tangible. Cinco años en los que la lluvia seguirá golpeando con fuerza, inundando calles y hogares, lo que nos demuestra que este avance no es más que una declaración de buenas intenciones. ¿Es una buena noticia? Sí, pero falta mucho por avanzar.
Este esfuerzo, que se enmarcó en el Programa de "Ciudades Más Humanas", ejecutado gracias a una inversión de casi 500 millones de pesos por parte del Gobierno Regional, respaldan este ambicioso proyecto, pero la magnitud de la tarea requiere una inversión que va más allá de lo financiero, pues el estudio también arrojó que se requiere más o menos una inversión total en Red Primaria y Secundaria de Aguas Lluvias de 77.000 millones de pesos.
Esta actualización del Plan Maestro de Puerto Montt, viene a dar solución a problemáticas históricas de inundaciones que sufre nuestra ciudad en lugares como Avenida Austral, principalmente en el sector del colegio Leonardo da Vinci y Villa Rayen entre otras. Asimismo, este plan considera sectores como Cardonal y La Vara donde actualmente está creciendo habitacional e industrialmente nuestra ciudad.
Este desafío no solo es estructural sino también ambiental. La propuesta de eliminar los sistemas unitarios, que mezclan aguas lluvias y servidas antes de llegar al mar, es un paso valiente hacia la protección de nuestros recursos naturales. Esta iniciativa, sin embargo, debe acelerarse para evitar que Angelmó, un punto turístico clave, siga enfrentando problemas sanitarios cada invierno.
Mientras fui presidente de la Comisión de Infraestructura, siempre apoyé este tipo de recurso e iniciativas, porque entiendo la necesidad de avanzar. Por eso creo que este respaldo financiero inicial es alentador, pero el tiempo apremia. La ciudad no puede permitirse esperar mientras las lluvias inundan calles y hogares. Puerto Montt necesita acciones concretas y rápidas.