Sociedad médica y diputado piden aclarar la "exportación de pacientes" oncológicos
POLÉMICA. Como una "práctica fuera de lo común" calificó presidenta de la Sochira convenio que envía a enfermos con cáncer a atenderse a Bariloche, en medio de cuestionamientos por sobreprecios. Lilayú exige transparencia, puesto que se usan dineros públicos en este trato directo. Servicio evalúa continuar con plan piloto el próximo año.
Sigue la polémica por el plan piloto y trato directo, sin licitación, entre el Servicio de Salud del Reloncaví y una clínica oncológica de Bariloche, que tiene como fin atender a pacientes con cáncer de la Región de Los Lagos, los que no tendrían acceso a tratamiento en la zona ni en el resto del país.
Desde la Sociedad Chilena de Radioterapia Oncológica acusaron al Servicio de Salud de intentar "desviar la atención" y de incurrir en una práctica de "exportación de pacientes", luego que su directora, Bárbara del Pino, justificara tal mecanismo mediante la activación del decreto con fuerza de ley (DFL) 36 de 1980, bajo la premisa de poder dar atención oportuna a enfermos oncológicos con cobertura GES.
Este clima de dudas entre denuncias por sobreprecios, al doble de lo que se cobra en Chile, y un mecanismo de gestión que no incluye una licitación con prestadores chilenos, según dijo en su momento Del Pino, puede derivar en "un daño al territorio", al correr el riesgo que "nos cierren las puertas por desconfianza. Es una línea que se puede traspasar y que va a generar que nos cierren las puertas del financiamiento, desde la credibilidad. Le están cerrando las puertas a las personas".
Según Del Pino, existiría una especie de "estrategia muy estudiada que se ha instalado" y que incluso se ha llegado a la Comisión de Salud del Senado. Ello, a propósito de la participación del vicepresidente de la Sociedad Chilena de Radioterapia Oncológica, Hernán Letelier, en una sesión de dicha comisión de la Cámara Alta.
"Me duele mucho que la FALP (Fundación Arturo López Pérez) esté detrás de todo esto", ya que el doctor Letelier también forma parte del equipo médico de esa institución, sostuvo la directora del Servicio de Salud del Reloncaví el pasado 7 de diciembre.
Exportación de pacientes
A través de una carta al director a este Diario, Claudia Carvajal, presidenta de la Sociedad Chilena de Radioterapia Oncológica, apuntó a que "exportar pacientes oncológicos es, a lo menos, una práctica fuera de lo común que omite un sinnúmero de fiscalizaciones a las que son sometidas en Chile las partes involucradas en este tratamiento oncológico integral desde el ejercicio de las distintas profesiones participantes (médicos, físicos, tecnólogos, enfermeros, etc.), la certificación de los equipos y su correspondiente calibración, hasta el control de calidad de cada tratamiento y la evaluación de sus resultados para garantizar que el paciente sea tratado con el estándar que se requiere".
Asimismo, dio cuenta que "los ataques personales" no debieran ser parte de esta discusión. "La inquietud que hemos manifestado no se basa en ningún interés gremial ni comercial, sino en garantizar la búsqueda de mejores condiciones posibles para los pacientes que enfrentan esta grave enfermedad".
Consultado por El Llanquihue, el vicepresidente de la Sociedad Chilena de Radioterapia Oncológica, Hernán Letelier, afirmó que los dichos de Del Pino son "lamentables y decepcionantes", puesto que no entregan, a su juicio, argumentos sólidos desde una perspectiva "técnica, económica y sanitaria", sino que "busca desviar la atención, desacreditando esta recomendación", apuntando directamente "al lugar de trabajo de quien entrega esta opinión, en representación de una sociedad científica", sostiene Letelier, en alusión a su rol como oncólogo de la Fundación Arturo López Pérez.
"No consideramos que es una respuesta propia para una situación tan grave como esta", remató el Dr. Letelier.
El pasado 6 de diciembre, en entrevista con este Diario, y a días de su exposición en la Comisión de Salud del Senado, apuntó a que como sociedad científica fueron marginados de la discusión de este convenio. Y agregó que no duda de las buenas intenciones de sus promotores, sin embargo, ello "no tiene sustento en criterios económicos. A alguien le están pagando mucho menos o a alguien le pagan mucho más".
Fiscalización
Para el diputado UDI Daniel Lilayú, el plan piloto del Servicio de Salud del Reloncaví "es algo inédito" y admitió desconocer antecedentes de convenios similares en otras latitudes del país. "Acá hay mala gestión", agrega el también médico, justificando su argumento en que con los recursos disponibles se pueden contratar radioterapeutas, por ejemplo, los días sábado. "Con recursos GES, de Fonasa, aquí se están pagando servicios en el extranjero", señala.
Otras dudas del legislador apuntan a cómo se podría, por ejemplo, detectar una posible mala praxis de un profesional argentino y bajo qué ordenamiento jurídico se podría perseguir penalmente una situación de esa naturaleza. Y en tercer lugar, sostiene que la salida a otro país de un paciente con cáncer lo aleja de su núcleo familiar completo, por lo que son situaciones que deben ser aclaradas.
-Dado el contexto nacional de otros casos de asignación de recursos vía trato directo, y que hoy está bajo la lupa, como el denominado "Caso Convenios", ¿cree que existe un mecanismo similar?
-Esta es plata de todos los chilenos, que vienen de nuestros impuestos. Los tratos directos corresponden cuando se cumplen ciertas premisas. En este momento los chilenos exigimos transparencia. Si hay cupos de atención en Chile, esto llama la atención y la duda.
"Exportar pacientes oncológicos es una práctica fuera de lo común que omite un sinnúmero de fiscalizaciones a las que son sometidas en Chile las partes involucradas en este tratamiento oncológico"
Claudia Carvajal,
presidenta de la Sociedad Chilena de Radioterapia