Correo
Javier Milei y el BRICS
La asociación de países ha sido la forma más pragmática de confrontar el poder de una hegemonía. Un ejemplo de esto es el denominado BRICS, agrupación de países conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, que nace con el objetivo de ser una alternativa al poder económico de Washington.
Reconociendo el tamaño de su mercado, y con el liderazgo de China, el BRICS ha intentado empoderarse como actor global, no sólo intentando sumar a nuevos actores, sino también en lo que refiere a involucrarse en temas políticos internacionales que van más allá de lo netamente económico. En ese contexto, Argentina -y tras la cumbre realizada en agosto pasado en Johannesburgo- fue invitada (junto a Etiopía, Egipto, Irán, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos) a adherirse a la agrupación, lo que fue muy bien recibido por el gobierno de Alberto Fernández.
Sin embargo, la llegada de Javier Milei a la Casa Rosada derrumbó esa posibilidad en virtud de las ostensibles diferencias ideológicas entre el líder libertario y el comunismo chino.
Es importante recordar que el nuevo mandatario argentino recibió una carta de Xi Jinping, por la cual se le invitó a integrarse al conglomerado, enalteciendo las importantes "ganancias compartidas" que generaría el vínculo. La respuesta negativa de Milei, si bien suavizó el tono hacia China respecto de lo que había señalado como candidato, fue categórica: Argentina es socio de Estados Unidos.
Así entonces, se infiere que el gobierno de Milei, en ningún caso, estará dispuesto a fortalecer el declive del dólar que promueve China.
Pedro Díaz Polanco, Escuela de Administración Pública, Universidad Austral de Chile, sede Puerto Montt
"El Mikele chileno"
Es innegable que en Chile tenemos diversos problemas, pero los más relevantes para la ciudadanía son "seguridad" -la percepción de inseguridad en Chile llegó a un 90%, la más alta en una década- y "economía", al preverse que el PIB real se contraiga un 0,4% en 2023 y vuelva a una tasa de crecimiento tendencial del 2% en el medio plazo, según el Banco Mundial.
Al analizar el clima político y social de los demás países de la región nos encontramos que estos dos problemas son en diferentes escalas y medidas compartidos en América Latina. En el caso de la problemática de la economía, es a Argentina a quien se le atribuye una situación catastrófica, pero eligió a un Javier Milei para probar otra vía de solución de una forma radical. En la segunda problemática de seguridad tenemos el ejemplo de El Salvador, quien eligió a un Nayib Bukele para enfrentar dichas problemáticas, también de forma radical.
Entonces, si la clase política chilena no es capaz de realizar un cambio de paradigma en el corto plazo en nuestro país, lo más probable es que Chile tenga su propio "Mikele", un personero político que traiga soluciones radicales como Milei para enfrentar dichos problemas económicos, y como Bukele en el ámbito de seguridad.
Esto será la manifestación de una clase gobernante completamente inútil e ineficaz para solucionar los reales problemas sociales de la gente.
Felipe Jara S.
"Segundo plano"
El Presidente Gabriel Boric aspiraba a forjar un legado a través de un gobierno transformador, pero durante sus dos primeros años, los plebiscitos constitucionales desplazaron su gestión a un segundo plano. Con un pronóstico similar para el año 2024 debido a las elecciones municipales y el año 2025 por las presidenciales, su mandato parece abocado a quedar en segundo plano.
En este escenario y sin lograr avances notables, la administración discreta del Presidente Boric empieza a desvanecerse prematuramente. Este declive genera una sensación de alivio en la derecha y, simultáneamente, una percepción de oportunidad perdida en la izquierda.
Así, este gobierno comienza a perfilarse como un mandato discreto, efímero y débil, destinado a quedar relegado en la historia, en un segundo plano. ¿Qué medidas tomará el Presidente en 2024 para intentar revertir esta situación y no quedar marcado por derrotas electorales, inseguridad y escándalos de corrupción?
Cristóbal Quiroz N.
Educación financiera
A pocos días de que se termine 2023, es importante mirar en retrospectiva y analizar los principales desafíos de este año que se va. En ese sentido, es clave reconocer los avances que se han logrado en educación financiera; que nos desafiemos a avanzar e integrarla desde distintas etapas de la formación.
Esto adquiere especial relevancia si observamos las cifras. Según el último estudio de Cadem junto al Depósito Central de Valores (DCV), el 42% de los chilenos tiene un bajo nivel de conocimiento financiero, mientras que según la nuestra encuesta "Sueños y temores de los chilenos" 2023 -que realizamos junto a Cadem y la Universidad Adolfo Ibáñez-, el ahorro voluntario de los chilenos cayó tres puntos porcentuales, llegando al 21%, la cifra más baja desde 2020.
Las nuevas generaciones están interesadas por aprender, muestra de ello son los más de 550 jóvenes de entre 18 y 25 años que egresaron este año de nuestro programa de Educación Financiera, un curso online y gratuito que realizamos junto a la Universidad de Valparaíso, para todo Chile.
Del total de graduados de nuestro programa este año, 90 personas son habitantes de la Región de Los Lagos, lo cual muestra el interés que hay por aprender sobre estas materias. Esta es una oportunidad para que, quienes somos parte del sector privado, podamos seguir generando iniciativas conjuntas que impulsen la educación financiera desde los colegios y así, aportar en la construcción de una sociedad cada vez más alfabetizada financieramente.
Patricio Martínez, gerente general de Mutual de Seguros de Chile