Viviana González

Ha ce más de una década que la Municipalidad de Puerto Montt, encabezada por el alcalde Gervoy Paredes, prometió construir infraestructura deportiva para los deportistas de la capital regional, como un nuevo autódromo, velódromo, piscina municipal, canchas de tenis y una casa bote.

Hoy, muchos de esos deportistas que se reunieron con el jefe comunal, se muestran desesperanzados ante el incumplimiento prometido, sobre todo, a disciplinas que tantas medallas han entregado no sólo a la comuna, sino que al país, como el remo.

Cronología de una promesa

Corría el año 2012 y el hoy alcalde Paredes se encontraba en plena campaña política a fin de llegar al sillón edilicio. Era septiembre y anunciaba que de llegar al edificio de calle San Felipe construiría una piscina temperada que sería cubierta, semiolímpica, de 20 metros de largo por 15 de ancho y que incluiría servicios higiénicos, camarines, salas de monitoreo, enfermería, oficina de administración y graderías. Es más, hasta proyectaba que recibiría entre 50 mil y 60 mil personas al año.

En ese entonces el otrora candidato a alcalde, dijo que este proyecto era para "fomentar la práctica de clases de aeróbica acuática, natación, gimnasia terapéutica para adultos mayores, waterpolo, hidrogimnasia, nado sincronizado y competencias de natación en que participen estudiantes de escuelas municipales".

En el 2013 y ya con Gervoy Paredes como jefe comunal, visitaron el terreno que el Instituto Nacional de Deportes (IND) entregaría en comodato para la construcción de la piscina y el velódromo.

En noviembre de 2015 se anunció con bombos y platillos la construcción de un velódromo y complejo tenístico en el sector de Bosquemar. Aquella noticia, publicada en las redes sociales personales del edil, esperanzó a los ciclistas y tenistas de la comuna.

El proyecto, en tanto, estaba contemplado que se levantaría en ocho hectáreas y la inversión alcanzaría los 2.300 millones de pesos de esos años, los que serían financiados con aportes del Ministerio