El presidente de Bulgaria, el prorruso Rumen Radev, advirtió sobre la posibilidad de un conflicto con armas nucleares si algún país miembro de la OTAN envía tropas a Ucrania.

"Compartimos nuestra preocupación por la guerra de Rusia contra Ucrania. Vemos que la estrategia de lograr la victoria en el campo de batalla por medios militares no ha dado el resultado deseado en dos años", dijo Radev.

El mandatario reconoció que sigue con "evidente preocupación" la conferencia internacional en apoyo a Ucrania de líderes europeos en París, donde "comienza a ponerse a prueba la opinión pública sobre el envío de tropas de determinados países".

En este foro, el presidente francés, Emmanuel Macron, dijo el lunes que no se debería descartar el envío de tropas terrestres de países occidentales a Ucrania en el futuro.

"Todos vemos que la estrategia de dar cada vez más armas claramente no funciona. Creo que los líderes europeos mostrarán suficiente sentido común y un enfoque equilibrado al apoyar a Ucrania para que no acabemos con una escalada extraordinaria, con un riesgo de Tercera Guerra Mundial y un conflicto nuclear", señaló Radev.

El presidente búlgaro dijo que el envío de tropas a Ucrania, incluso sobre la base de un acuerdo bilateral, "significa un conflicto global y un enorme aumento del riesgo de conflicto nuclear", explicó Radev.

Por su parte, el vocero de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, aseguró que en caso se envíen tropas, "hablamos ya no de la posibilidad, sino del carácter inevitable (del conflicto con la OTAN)".

Europa se desmarca

El canciller alemán, Olaf Scholz, subrayó que no se contempla la posibilidad de enviar soldados europeos o de la OTAN a combatir en Ucrania.

"Lo que habíamos acordado juntos y entre nosotros también seguirá vigente en el futuro, que no haya fuerzas terrestres, que no haya soldados en suelo ucraniano que hayan sido enviados por Estados europeos o de la OTAN", afirmó.

La vocera del gobierno español, Pilar Alegría, indicó que "no estamos de acuerdo y tenemos que concentrarnos, además, en lo urgente, que es acelerar la entrega de material".

El portavoz comunitario de Exteriores de la Unión Europea, Peter Stano, afirmó que "no se ha discutido a nivel de la UE".

El vocero del alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y de Seguridad, Josep Borrell, agregó que "estamos en un momento de la discusión en que los Estados miembros comparten libremente, pluralmente (…), sus puntos de vista sobre lo que quieren alcanzar y cómo".

"No hay ninguna decisión a nivel de la UE sobre ningún tipo de envío de tropas o fuerzas terrestres a Ucrania para combatir", insistió el portavoz.

De todas formas, el pleno del Parlamento Europeo dio luz verde a la revisión del presupuesto de la UE hasta 2027, que incluye el nuevo paquete de ayuda a Ucrania de 50.000 millones que vetó hasta febrero el gobierno húngaro.

Los 499 votos a favor de los eurodiputados, frente a los 67 en contra y las 21 abstenciones, abren la puerta al primer tramo de ayudas para Kiev, que ascenderá a 4.500 millones de euros y llegará a las autoridades ucranianas a lo largo del mes de marzo para evitar potenciales problemas de liquidez en medio de la agresión rusa sobre su territorio.

El presidente de Argentina, Javier Milei, decidió romper la tradición y cambió a las 21:00 hora local el discurso anual que los mandatarios hacen el 1 de marzo ante el Congreso, que sirve como apertura a las sesiones ordinarias del curso parlamentario.

Mediante un decreto publicado ayer en el Boletín Oficial, Milei sorprendió al establecer el nuevo formato de la primera apertura de sesiones que inaugurará el ultraliberal que asumió el 10 de diciembre pasado, en lugar del mediodía como era costumbre. "Con este cambio de horario se busca que la mayor cantidad de argentinos puedan escuchar al presidente después de sus horarios de trabajo" y "tenga la posibilidad de verlo en vivo", justificó el vocero presidencial, Manuel Adorni.

Con esta nueva decisión, continúa una línea disruptiva respecto al Congreso de la Nación, ya que el pasado 10 de diciembre, cuando asumió como presidente, eligió no dar su discurso inaugural dentro del recinto, sino en la calle, frente a sus seguidores.

El discurso que dé Milei ante los legisladores tendrá lugar en el horario de mayor audiencia de la televisión argentina, al tiempo que emula el estilo en que los presidentes estadounidenses dan el discurso del estado de la Unión.

Hay expectativa por las palabras de Milei, después del fallido paso por el Congreso de su proyecto estrella, la Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos -conocida como 'ley ómnibus'-, que establecía la línea medular de su programa de Gobierno, desregular la economía y reducir el peso del Estado, para cuyo debate había convocado a sesiones extraordinarias hasta el 15 de febrero.

El proyecto volvió al punto de partida y, desde entonces, Milei se ha enfrentado con los legisladores que rechazaron su iniciativa, con los gobernadores de provincias cuyos diputados votaron en contra, además de chocar con el sector sindical y movimientos sociales.

La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, descartó que la economía del país vaya a entrar en recesión y aseguró que las perspectivas para este año son "buenas", con la inflación a la baja y el índice de desempleo en torno al 4%. Previa a su participación en la reunión de ministros de Finanzas de los países del G20 en Sao Paulo, Yellen destacó la "resiliencia" de su país, que a su juicio está yendo "extraordinariamente bien" en el ámbito económico. "Tenemos buenas perspectivas", aseguró la alta funcionaria, quien recordó que EE.UU. creció 3,1% en 2023, por encima de las previsiones iniciales.

Sobre la inflación señaló que está a la baja tras el "tremendo progreso" de los últimos meses, el cual espera que continúe en este 2024 con el objetivo de que los precios alcancen las metas fijadas. Subrayó que el gobierno de Joe Biden no se sorprenderá si el crecimiento económico de este año es inferior al 3%, pero reafirmó que "ciertamente" no están esperando una recesión.

Yellen reconoció que "muchos pronósticos" indicaban una recesión, en función de la trayectoria de la inflación, pero señaló que los precios han bajado sin que la actividad económica se resintiera en exceso.

Este fenómeno lo atribuyó a que la escalada inflacionista de los últimos años fue consecuencia de "las disrupciones" que generó la pandemia de covid-19 y que "tomó mucho tiempo" para que se disiparan.

En tanto, Yellen instó a sus aliados a trabajar en fórmulas para 'descongelar' el valor de los activos rusos que mantienen bloqueados para contribuir a financiar a Ucrania.

"Nuestra coalición ha movilizado 285.000 millones (de dólares) en activos soberanos rusos, y nos mostraremos firmes para que estos activos permanezcan congelados hasta que Rusia pague por el inmenso daño causado", afirmó.