Grupos ambientalistas exponen sus aprensiones por proyecto inmobiliario en Puerto Montt
ALTO LA PALOMA. Tanto Gayi como Ambyter dieron a conocer su postura respecto a la construcción de más de dos mil viviendas. Acusan efectos ambientales, así como en la circulación de vehículos.
Sus aprensiones respecto del impacto que podría generar el desarrollo de un proyecto inmobiliario, expresaron vecinos de la cuarta terraza, en la parte alta de Puerto Montt.
Una reunión informativa, en el marco del proceso de participación ciudadana del proyecto, convocada por el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) de Los Lagos, permitió conocer detalles de esa iniciativa, así como la posibilidad que los habitantes del sector pudieran expresar sus inquietudes.
Margarette González, vecina de Valle Volcanes y socia de la Agrupación por la Defensa de los Humedales y Entornos Naturales, Gayi, definió que les preocupa el impacto ambiental, ya que -afirmó- en la zona existen seis humedales que estarían en riesgo y que habría efectos negativos en una napa subterránea, lo que afectaría esa fuente de abastecimiento para el suministro domiciliario.
"Si nosotros sacamos bosques, porque estamos hablando de 110 hectáreas, y se destruyen los humedales, esa napa va a morir", aventuró.
Mientras que Gladys Sánchez, directora de la Fundación Ambiente y Territorio (Ambyter), dijo que en relación a los humedales no se conocen medidas de reparación. Recordó que este proyecto ingresó al SEA "después que el Tercer Tribunal Ambiental de Valdivia acreditó daño ambiental", ya que las obras iniciadas se situaban sobre zonas del humedal urbano "Alto La Paloma" y el humedal "La Güiña".
Añadió que en el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) no se aborda el eventual impacto en el flujo de aguas lluvia, el seguimiento de la solución verde-azul, tala de bosque nativo y presencia de alerces, entre otras materias.
Planta de tratamiento
Otro punto que les llama la atención es que no existiría factibilidad sanitaria para esa zona, por lo que como solución se propone construir una planta de tratamiento de aguas servidas. González acusó que "no está siendo evaluada esa planta en el Estudio de Impacto Ambiental, sino que se haría más adelante. Nos hemos opuesto a esto, porque es como vender una casa sin baño".
De su lado, Sánchez expuso su inquietud por la relación que existiría entre la empresa titular del proyecto y la sanitaria que entregaría factibilidad sanitaria.
Apuntó que "ante la SMA