Israel anuncia rescate de cuatro rehenes en Gaza: la operación dejó al menos 210 muertos
GUERRA. Plagiados se encontraban repartidos en dos casas del campo de Nuseirat.
Agencias
Israel llevó a cabo ayer una exitosa operación de rescate de cuatro rehenes israelíes con vida en el campo de refugiados de Nuseirat, en el centro de la Franja de Gaza, donde al menos 210 personas murieron y más de 400 resultaron heridos bajo el intenso fuego israelí durante la misión.
Los rehenes rescatados con vida son Noa Argamani, de 25 años, cuyo video de su secuestr, en el que sale gritando "¡no me maten!" fue ampliamente difundido; Almog Meir Jan, de 21; Andrey Kozlov, de 27, y Shlomi Ziv, de 40, que fueron secuestrados por Hamás en el festival de música 'Nova' el 7 de octubre, durante el ataque terrorista masivo que dejó 1.200 muertos y 251 personas cautivas.
Es el mayor rescate que ha ocurrido desde el inicio de la guerra. La última vez que rescataron cautivos con vida fue en febrero en Rafah, a los argentino-israelíes Luis Norberto Har y Fernando Marman.
Los cuatro, que se encontraban ayer en buen estado de salud, fueron atendidos en el Centro Médico Sheba, en el área de Tel Aviv, donde se reencontraron con sus familias e incluso fue a visitarlos el primer ministro, Benjamin Netanyahu.
El Gobierno gazatí de Hamás dijo que en el operativo israelí en Nuseirat murieron al menos 210 personas y más de 400 resultaron heridas, según las víctimas que llegaron a los hospitales de Al Awda, en el campamento, y Mártires de Al Aqsa, en la ciudad de Deir al Balah.
"Condenamos la agresión de la ocupación 'israelí' contra civiles, niños y mujeres, y contra hogares seguros en el campamento de Nuseirat", denunció el gobierno islamista.
Compleja operación
La operación "Semilla de Verano" se llevó a cabo entre el Ejército, agentes del Shin Bet y la fuerza policial de élite Yamam, en dos puntos en el corazón de Nuseirat, y se saldó con la muerte de un comandante de Yamam, Arnon Zamora.
El vocero del Ejército, Daniel Hagari, indicó que se trató de una de las "operaciones más complejas" en la que las tropas "enfrentaron amenazas bajo intenso fuego". La misión fue aprobada el jueves por Netanyahu, aunque la orden de atacar dos edificios en el centro del campo fue dada ayer a las 11 hora local.
"La decisión de atacar ambos simultáneamente se debió a la posibilidad de que Hamás asesinara a los rehenes tras identificar la operación de rescate", indicó Hagari. Argamani estaba sola en una casa y los otros tres cautivos en otra; todas viviendas de familias palestinas a las que Hamás paga, según el Ejército.
El vocero admitió que en la operación murieron muchos civiles palestinos, aunque culpó a Hamás de mantener rehenes en un entorno civil y les acuso de atacar el vehículo con los rehenes y el agente herido, además de lanzar misiles antiaéreos contra sus helicópteros.
"En una heroica actividad operativa, nuestros combatientes lograron liberar a cuatro rehenes del cautiverio de Hamás y devolverlos a su hogar", dijo el titular de Defensa, Yoav Gallant.
Con este rescate, de los 251 secuestrados el 7 de octubre quedan en el enclave 116 cautivos, al menos 40 de ellos muertos según Israel -más de 70 según Hamás-.