Carolina Larenas

Cuatro estructuras destruidas, a los menos unas 20 personas damnificadas, cuatro bomberos lesionados y dos adultos mayores atendidos por personal de salud es parte del balance preliminar del incendio que la tarde de ayer ocurrió en Castro y que movilizó a unidades de emergencia de tres comunas.

A eso de las 17.45 horas se originó el siniestro en el tradicional barrio Lillo del sector portuario de la capital chilota, específicamente en el pasaje de ingreso al Centro de Creación Artística (Cecrea), el que se propagó rápidamente por el viento presente a esa hora.

Inicialmente, las unidades del Cuerpo de Bomberos de Castro enfrentaron la emergencia en el lugar, pero posteriormente se sumaron de Chonchi y Dalcahue, sobre todo con sus bombas aljibe.

El alcalde local, Juan Eduardo Vera (indep. de Chile Vamos), realizó ayer un balance preliminar de la afectación de las llamas, detallando que "estamos muy conmocionados por lo que ha sucedido en Lillo: tres viviendas habrían sido siniestradas, pero hay que considerar que detrás de cada una de ellas había otras, por lo tanto, se habla de un total de ocho".

Asimismo, el jefe comunal indicaba en su momento que "las personas afectadas alcanzan un total de 18 vecinos, muchos lograron trasladar sus cositas a la sede vecinal del sector que está aledaña en un momento tan duro y tan difícil". Extraoficialmente la cifra sería superior.

Vera agregó que desde el primer momento el municipio dispuso la colaboración del equipo de emergencia, el que colaboró con el despliegue de camiones aljibes en el sector.

"Gracias al trabajo de Bomberos se pudo detener este incendio para no afectar las viviendas vecinas que son todas de material ligero, alerce, maderas nativas y también he ordenado que el equipo del Departamento Social se traslade hasta aquí para poder levantar las fichas FIBE (Ficha Básica de Emergencia), para poder gestionar frente a los organismos que corresponde las ayudas", acotó el alcalde.

Patricio Torres, segundo comandante del Cuerpo de Bomberos de Castro, explicó que, "una vez que arriban las tres primeras compañías, se comienza con un ataque defensivo y ofensivo. En primera instancia tuvimos propagación a cuatro estructuras, todavía no tenemos claro en cuantas viviendas se subdividían, pero hablamos de 4 estructuras comprometidas en su totalidad".

Junto con ello, el oficial bomberil sumó que "participó el Cuerpo de Bomberos de Dalcahue y el de Chonchi. En un principio tuvimos problemas de alimentación de agua, pero era debido a la magnitud del incendio que nos encontramos y por eso solicitamos que dos unidades trabajaran succionando agua desde el mar".

Entorpecieron

Torres lamentó la actitud de algunos vecinos que por momentos entorpecieron la labor bomberil, incluso generando peleas en las cercanías de los carros bomba.

Por su parte, Cristian Ruiz, encargado de Emergencia del municipio local, señaló que "se está trabajando en el levantamiento de información de las personas que resultaron damnificadas, los círculos de apoyo que puedan tener los núcleos familiares que resultaron afectados y hemos dispuesto el despliegue de los recursos municipales en terreno. Es importante recalcar a la población que cada vez que ocurra una emergencia dejar las vías rápidas para los vehículos de emergencia y que no son eventos fotográficos o cinematográficos, así es que un llamado al respeto de las familias".

Margarita Álvarez, presidenta de la Junta de Vecinos Blanco Encalada, afirmó que "es realmente fuerte porque hay vecinos que lo perdieron todo, vecinos que se conocen hace años y que perdieron su herramienta de trabajo del día a día y realmente duele y también había mucha gente desconocida y no sabemos si estaban de paso acá".

La dirigenta sumó que "lo importante es que no hay vidas que lamentar. Haremos una asamblea extraordinaria (hoy) para ver cómo podemos ayudar a estos vecinos".

Producto de la emergencia -en la que se trabajó por cerca de cuatro horas- se registraron cuatro voluntarios de Bomberos con lesiones leves y personal de salud atendió a dos adultas mayores que se descompensaron, siendo cuatro del total -dos voluntarios y dos lugareñas- derivados al Hospital Augusto Riffart.

Al cierre se desconocía si las construcciones tenían seguros, siendo materia del Departamento de Estudios Técnicos (DET) de Bomberos de Castro establecer la causas y el origen del incendio en el histórico barrio.