El saqueo en la alcaldía de Puerto Montt
Nicolás Pacheco,coach de modelo , de negocios y expansión
Las recientes revelaciones sobre las irregularidades cometidas en el Departamento de Administración de Educación Municipal (Daem) de Puerto Montt, junto con la polémica sobre la pileta de aguas danzantes y las acciones de Carlos Soto, han culminado en la destitución del ahora ex alcalde Gervoy Paredes. Este escándalo es sólo uno más de una serie de episodios que han sacudido la confianza de la ciudadanía respecto de la clase política y la administración pública.
El hecho de que el Tribunal Electoral Regional haya encontrado que 8 de los 17 cargos presentados son constitutivos de abandono de deberes y faltas a la probidad administrativa, es un golpe devastador para el dúo dinámico Paredes-Soto. La acusación en contra de Soto comprende los $17 millones que se autorizó pagar en horas extra, la organización de una comida de $4 millones con dirigentes sociales en el club de yates y el pago de los $600 millones a la empresa que ejecutó la pileta, sin que esta contara con el visto bueno de su mismo equipo técnico.
Pese a los cuestionamientos detrás de Carlos Soto, Paredes lo eligió como jefe de concesiones, aunque no formaba parte de los tres primeros puestos del concurso público que se ejecutó para la elección de dicho cargo. A ello se suma que Soto fue formalizado por tenencia ilegal de arma de fuego y porte de droga, mientras se allanaba su casa por una causa de lavado de activos que aún se investiga.
La situación del Daem es otra joya, donde se malversaron fondos destinados a subvenciones para la educación de alumnos vulnerables. Fue simplemente un acto miserable. No sólo se desviaron recursos que van en beneficio de asegurar la educación de los niños más necesitados, sino que fueron utilizados para fines que, en el mejor de los casos, son cuestionables y, en el peor, delictivos. Podríamos decir que el Daem era realmente la casa fantasma, ya que en este departamento existían al menos 350 funcionarios fantasmas.
Estos abusos de poder, administración y gestión pública deplorable debe hacernos reflexionar sobre la importancia de informarnos como ciudadanos antes de elegir a nuestros candidatos a cargos públicos, al menos averiguando su trayectoria, experiencia, antecedentes, estudios y hechos que ameriten tener el honor de dirigir la comuna de Puerto Montt. Sólo recordar que en esta administración se invirtieron cerca de $1.000 millones en la famosa pileta de aguas danzantes y que ya lleva tres años cerrada.
La destitución es un paso necesario, pero no suficiente. Es urgente que se tomen medidas para asegurar la transparencia y la rendición de cuentas en todos los niveles de la administración pública. Sólo a través de una fiscalización rigurosa y un compromiso firme con la ética en la gestión pública se podrá empezar a restaurar la confianza en nuestras autoridades, y ver que comunas como la nuestra sean cada día un mejor lugar para vivir.