"Ha muerto el campeón, ¡que viva
DESPEDIDA. Más de un centenar de personas, entre ellos muchos compañeros de boxeo y público del deporte, recordaron las hazañas que obsequió a la ciudad.
En el Gimnasio Municipal de calle Lota, más de un centenar de personas enmudecieron cuando por los parlantes comenzó a escucharse la música introductoria del mítico programa Zoom Deportivo y el presentador, micrófono en mano, inició su homenaje anunciando a todo pulmón: "La úuultima pelea de la nocheeee". Las lágrimas se hicieron evidentes en los rostros de muchos espectadores de avanzada edad, que rememoraron gloriosos episodios de los años sesentas y setentas, recuerdos de un gimnasio abarrotado y vibrante que clamaba por ver al campeón en acción.
Siguiendo con una rutina casi religiosa entre los seguidores del boxeo, el presentador continuó su arenga. "En este rincón, Honorio 'Coloso' Bórquez. Peso mediano ligero. Representando a Puerto Montt de Chile". Sus palabras fueron contestadas por el emocionado aplauso de los presentes justo cuando en todo el gimnasio retumbó el sonido de la campana, la misma que durante 27 años marcó el inicio de los encuentros pugilísticos más esperados por los puertomontinos.
En ese ambiente de recuerdos, de reencuentro entre las pasadas glorias de este deporte con las nuevas generaciones de peloduros, y de un compartido sentimiento de gratitud por tantas alegrías que obsequió con sus triunfos, Puerto Montt brindó ayer un último adiós a quien es considerado como el mayor exponente de esta disciplina en la zona: Honorio Bórquez Legüe.
Los años dorados
El féretro con los restos del "Coloso" arribaron pasadas las 13:30 horas al gimnasio Mario Marchant Binder y fueron colocados en el centro de la cancha, adornados por unos vistosos guantes de box colocados a sus pies, como en posición de descanso.
El principal orador de la jornada fue el representante del boxeo comunal, Heriberto Soto Alvarado, quien dirigió un emocionado discurso en representación de los clubes comunales de boxeo, de la Escuela de Boxeo de Alerce, el Club de Boxeo Padre Hurtado, de la Escuela de Boxeo Vieja Escuela, del Club de Boxeo Caupolicán de Fresia, del Club de Boxeo Aguas Azules, de la Escuela de Boxeo de Mirasol, y de los deportistas de Puerto Montt.
En su alocución, Soto repasó la carrera deportiva de Bórquez, la que reconoció que coincide con la época de gloria del boxeo local. "Fueron nuestros años dorados, que han quedado grabados en la mente de todos los puertomontinos de esa generación, impulsada por hombres legendarios que con un gran trabajo le dieron brillo y calidad al box de Puerto Montt. Todos acompañados de una seguidilla de títulos nacionales. Cómo no recordar, entre otros, a ese gran dirigente que fue don Manuel Lagos, cómo no recordar esos campeonatos de los barrios, donde tú naciste, con gimnasios llenos y con esas veladas interciudades donde se consagraron destacados valores nuestros como Llanada Grande, el 'Roto' Díaz, (José) Vivar, José Opazo, Carlos Soto, Pedro Godoy, (Daniel) Cheuquemán, Emilio Díaz y nuestro recordado Mario de la Paz. Con sus brillantes participaciones en campeonatos nacionales y el logro de los primeros triunfos del boxeo de Puerto Montt a nivel nacional", recordó.
La voz del boxeo local resaltó que todos aquellos triunfos y títulos nacionales iniciaron con las primeras victorias de Honorio Bórquez en 1967, el año en que obtuvo en forma invicta su primer título de campeón de Chile para Puerto Montt, en la categoría medio mediano ligero.
"¡Cómo no recordar, Honorio, el recibimiento que te brindó la ciudad de Puerto Montt, cuando las familias enteras salieron a las calles para verte llegar junto a los carros de Bomberos que te salieron a recibir. Pasaron unos meses y en 1968 te la jugaste entero, fuiste los colores en el Campeonato Latinoamericano de Boxeo y nos llenaste de gloria, de orgullo (…) Y no te quedaste allí, fuiste el primer puertomontino en participar y representar a Chile en los Juegos Olímpicos de México 1968. ¡Qué orgullo para Puerto Montt! Y todo, Honorio, producto de tu trabajo, de tu entrega, de tu humildad y compromiso con el deporte de nuestra ciudad", afirmó.
En su despedida, Heriberto Soto recordó la frase que solía usar en sus relatos radiales de sus peleas el periodista de El Llanquihue, Edmundo Johnson: "Sonríe porteño, que este pelea ya la tienes ganada".
Al finalizar el homenaje, de las gradas surgió un espontáneo grito que bien reflejó el sentir de la comunidad presente: "Ha muerto el campeón, ¡que viva el campeón!".
Siempre en la memoria
Fueron muchos los ex compañeros de boxeo que lo acompañaron en su despedida definitiva. Entre ellos estuvo Enrique Gadaleta, boxeador iniciado en el ex Coliseo de calle Antonio Varas, quien refrendó el hecho que Honorio levantó e hizo famoso al boxeo de Puerto Montt. "Aquí peleó con los mejores de Santiago, de Iquique, el cabro fue muy bueno, tenía mucho punch", contó. Así también lo recordó con especial afecto Juan Pedro Ñanco, quien lo acompañó en la última gira por Punta Arenas. "Peleábamos en el ring, pero nunca entre nosotros, nunca hubo un mal compañerismo. Por los títulos que tuvo, fue el más grande de Puerto Montt", dijo.
Sin embargo, fue Hernán "Roto" Díaz, otra de las leyendas del boxeo local, quien acaparó las miradas y las remembranzas de la fanaticada, sobre todo ya que con él disputó la exhibición que marcó su retiro del deporte. "Peleamos juntos, pero él siempre me decía, tú Hernán eres técnico, peleas muy lindo. Como buen amigo, nunca tuve un problema con él", mencionó.
Ahora bien, en la disputa por el pedestal, Díaz es claro. "Después de mi, Honorio fue el boxeador más grande de Puerto Montt. Yo comencé primero y acá en Puerto Montt era el hombre del cartel, o sea, yo siempre disputé todas las peleas de fondo con todos los campeones de Chile. Yo no peleé en los campeonatos de los barrios, no, yo peleé altiro con puros campeones de Chile".
El adiós de Cruzat
Quien también tuvo gratos recuerdos de Honorio Bórquez, fue el ex campeón mundial de boxeo en categoría pesos crucero, Carlos Cruzat.
"Él apoyó mucho el deporte en Puerto Montt y levantó el boxeo en el sur. Hoy todos estamos de luto, la gente del boxeo. Tuve la oportunidad de compartir con él en varias oportunidades acá en Fresia, en Parga. Ahí conversamos un poquito de su vida y de su carrera, junto a Iván Corral, quien fue mi entrenador en la selección chilena y además fue su compañero de equipo. Así que igual me afectó su partida, porque no me alcancé a despedir, habíamos quedado de acuerdo en juntarnos, compartir. Pero no se pudo".
el campeón!": el emotivo adiós de
Puerto Montt a Honorio Bórquez
1993 fue el año en que