Movimientos ciudadanos: la fuerza viva que cuida el medio ambiente en la región
El resguardo de los ecosistemas es una bandera de lucha en Los Lagos por parte de la comunidad, quienes son los que verdaderamente han levantado distintos temas para hacer reaccionar a la institucionalidad creada para cumplir con esta tarea. Distintas causas nutren la historia sobre la protección del territorio regional.
En los últimos años se han levantado distintas causas ambientales en la región, donde las organizaciones ciudadanas han sacado a la luz pública esos temas, dejando al descubierto distintas afectaciones ambientales. Incluso han logrado frenar megaproyectos que traerían serios riesgos a los ecosistemas.
La región posee una multiplicidad de zonas de protección, dada la riqueza de recursos naturales, con bosques y acuíferos que son los hábitat de una diversidad de especies que conforman una flora y fauna única en el mundo y que, según afirman distintos representantes de la sociedad civil organizada, muchos de ellos han sido salvados sólo por el empeño y voluntad de la ciudadanía, donde la institucionalidad estatal competente en el área ha meramente sido reactiva.
La lucha por el agua
Dentro de las grandes batallas ambientales de la ciudad de Puerto Montt, está la de los vecinos por proteger los numerosos humedales que existen en el radio urbano de la comuna. Así surgió la unión de vecinos el año 2015, para resguardar una laguna que estaba frente a sus casas, en el sector Jardín Oriente, que ahora es el humedal Llantén.
Así lo relata el presidente de la Agrupación Cultural por los Humedales y Entornos Naturales, también conocida como "Gayi", David Hinostroza, magíster en Medio Ambiente, quien cuenta que comenzar esta cruzada no fue fácil, ya que con todo el entusiasmo, los vecinos golpearon muchas puertas de instituciones estatales, pero en estos organismos no conocían bien el concepto de la palabra humedal.
"Poco interés tenían, en realidad cero. Nos cerraron todas las puertas, por lo que encontramos la vía legal y presentamos un recurso con un abogado que venía saliendo de la universidad y se interesó en este caso. Llegó con todas las ganas y presentamos un recurso de protección el año 2017, pero no prosperó en Puerto Montt y nos fuimos a la Corte Suprema, hasta que en agosto de 2018 nos dio la razón y declaró al humedal Llantén bajo protección, porque una inmobiliaria lo estaba interviniendo para sus proyectos", relata.
Ese fue el primer logro del grupo sin contar con una legislación específica para esta materia, por lo que incluso aquel caso se utilizó para la creación de la actual Ley de Humedales Urbanos.
"Después todo el mundo se quiso subir al carro, pero fue un logro comunitario que se hizo con la voluntad de abogados también, que estuvieron trabajando. Fue un hito ambiental importante en el país", manifiesta.
Hinostroza señala que este gran logro fue la catapulta para continuar un trabajo más amplio para visualizar qué pasaba con los otros humedales de la ciudad y con otros ecosistemas, por lo que en ocho años han estado permanentemente alertando y denunciando distintas afectaciones, sobre todo en la zona de la cuarta terraza de Puerto Montt, ya que es un territorio fundamental para el abastecimiento de agua de la comuna.
"Hay un acuífero subterráneo y en la superficie hay muchos humedales y turberas, bosque nativo, que son los últimos espacios que quedan de su tipo, siendo muy importantes para Puerto Montt. Eso lo estableció Sernageomín a través de estudios que avalan la presencia del acuífero y el servicio que prestan a los humedales", detalla.
No obstante, el gran problema que han debido enfrentar, al catastrar los humedales, es que estos en su mayoría se encuentran dentro de terrenos de inmobiliarias, por lo que han sido rellenados y drenados, donde luego se han desarrollado proyectos de viviendas.
Entre todos estos humedales, los ambientalistas ciudadanos llegaron a los emblemáticos casos más recientes, de Valle La Paloma y Valle Volcanes, donde este último comprende una superficie de más de 300 hectáreas, compuesto por cinco lagunas.
"Desgraciadamente se ha ido degradando este humedal de forma ilegal y con algunos permisos parciales. Poco a poco se le ha ido quitando terreno. Este humedal ya estaba bajo protección, pero los propietarios presentaron reclamación al Tribunal Ambiental, por lo tanto, a fines de mayo de este año se declaró la nulidad del reconocimiento como humedal", dice.
Esto se debió a que el Ministerio de Medio Ambiente abarcó una gran extensión de terreno y no informó de la medida a los propietarios, sin embargo, el tribunal no desconoció la existencia del humedal, sino que cuestionó el procedimiento de la declaratoria, pero las inmobiliarias con este fallo comenzaron a intervenir los terrenos, logrando modificar 12,5 hectáreas. Eliminaron turberas, bosque nativo y desviaron cauces.
"Por eso utilizamos nuevamente un recurso de protección
"Después todo el mundo se quiso subir al carro, pero fue un logro comunitario que se hizo con la voluntad de abogados también, que estuvieron trabajando. Fue un hito ambiental importante en el país"
David Hinostroza, presidente de la Agrupación Cultural por los Humedales y Entornos Naturales de Puerto Montt