Los problemas que se abren para Biden tras romper su promesa e indultar a su hijo
ESTADOS UNIDOS. "Es un mal precedente del que presidentes futuros podrían abusar", señalaron desde su propio sector. Trump fue más duro e ironizó.
AP
La decisión del presidente Joe Biden de retractarse de su palabra y otorgar un indulto categórico a su hijo Hunter, justo semanas antes de su sentencia programada por condenas de armas y fiscales, fue una sorpresa no tan sorprendente.
No para aquellos que habían presenciado la angustia del presidente por sus dos hijos después de que sobrevivieran a un accidente automovilístico que mató a la primera esposa de Biden y a una hija hace más de medio siglo. O para aquellos que escucharon al presidente lamentar regularmente la muerte de su hijo mayor, Beau, por cáncer o expresar preocupaciones -principalmente en privado- sobre la sobriedad y salud de Hunter después de años de profunda adicción.
Pero al elegir poner a su familia primero, el presidente de 82 años -quien había prometido restaurar la confianza en las instituciones de la nación y el respeto por el Estado de Derecho-, planteó nuevas preguntas sobre su ya tambaleante legado.
"Este es un mal precedente que del que presidentes futuros podrían abusar y lamentablemente manchará su reputación", escribió en una publicación en X el gobernador demócrata de Colorado, Jared Polis. Añadió que, aunque podía simpatizar con las luchas de Hunter Biden, "nadie está por encima de la ley, ni un presidente ni el hijo de un presidente".
Los ayudantes y aliados de Biden se habían resignado a la perspectiva de que el presidente usara su extraordinario poder en los últimos días de su presidencia para asegurarse de que su hijo no pasaría tiempo tras las rejas, especialmente después de la victoria de Donald Trump. Los partidarios del presidente han visto durante mucho tiempo el compromiso de Biden con su familia como algo positivo, incluso si la conducta personal de Hunter y sus enredos se veían como una complicación.
Pero el indulto llega mientras Biden está cada vez más aislado desde la derrota de la vicepresidenta Kamala Harris, quien se lanzó a la campaña después de que el desastroso debate del presidente contra Trump en junio forzara su salida de la elección.
"por encima de la ley"
Trump prometió deshacer los logros emblemáticos de Biden sobre el cambio climático y revertir los esfuerzos del demócrata para reavivar las alianzas del país, mientras se prepara para tomar crédito por una economía fortalecida y miles de millones en inversiones en infraestructura.
Y ahora, Biden le dio al republicano un pretexto para llevar a cabo planes radicales para trastocar el Departamento de Justicia mientras el Trump jura venganza contra supuestos adversarios.
"Este indulto es simplemente desalentador para aquellos de nosotros que hemos estado ahí durante años gritando sobre la amenaza de Trump", dijo en MSNBC el republicano Joe Walsh, un crítico de Trump. "'Nadie está por encima de la ley', hemos estado gritando. Bueno, Joe Biden acaba de dejar claro que su hijo Hunter está por encima de la ley".
En reacción al indulto, el portavoz de Trump, Steven Cheung, dijo en un comunicado: "Ese sistema de justicia debe ser arreglado y el debido proceso debe ser restaurado para todos los estadounidenses, que es exactamente lo que el presidente Trump hará cuando regrese a la Casa Blanca con un mandato abrumador del pueblo estadounidense".
En redes sociales, el propio presidente electo llamó al indulto "un enorme abuso y un error judicial".
"¿El indulto que Joe le dio a Hunter incluye a los rehenes del 6 de enero, que ahora han estado encarcelados durante años?", preguntó Trump. Se refería a aquellos condenados por el violento ataque contra el Capitolio en Washington del 6 de enero de 2021. Trump y sus seguidores los llaman "rehenes".
Biden y sus portavoces habían descartado repetida y rotundamente que el presidente le otorgaría a su hijo un indulto.
En junio, Biden les dijo a los periodistas, cuando su hijo enfrentaba el juicio en el caso de armas de Delaware: "Me atengo a la decisión del jurado. Haré eso y no lo indultaré".
En julio, la secretaria de prensa Karine Jean-Pierre le dijo a los periodistas: "Sigue siendo un no. Será un no. Es un no. Y no tengo nada más que agregar. ¿Indultará a su hijo? No".
En noviembre, días después de la victoria de Trump, Jean-Pierre reiteró ese mensaje: "Nuestra respuesta se mantiene, que es no".
Ni Biden ni la Casa Blanca explicaron el cambio en el pensamiento del presidente, y las críticas llovieron tanto por haber roto su promesa como por el indulto en sí.
No es el primer presidente en indultar a un miembro de la familia o amigo enredado en tratos políticos. Bill Clinton indultó a su hermano Roger por cargos de drogas después de que había cumplido su condena aproximadamente una década antes. En sus últimas semanas en el cargo, Trump indultó a Charles Kushner, el padre de su yerno, Jared Kushner, así como a múltiples aliados condenados en la investigación sobre la injerencia rusa en las elecciones.
Sin embargo, Biden se presentó como alguien que ponía su respeto por el sistema judicial estadounidense y el Estado de Derecho por encima de sus propias preocupaciones personales, tratando de establecer un contraste deliberado con Trump, quien probó los límites de su autoridad como pocos predecesores.