Catalina Álvarez

Sin que pudiera materializarse uno de sus más anhelados sueños, en forma repentina falleció René Droppelmann Añazco, quien presidía la Corporación Egaña 60, el ex cuartel de la Policía de Investigaciones (PDI) de Puerto Montt, un centro de interrogación y tortura durante el gobierno militar.

Junto a su directorio y asociados, desde el año 2022 que Droppelmann realizaba gestiones para transformar ese edificio en un centro y museo de la memoria, un proyecto que no pudo ver hecho realidad.

Durante los años de la dictadura (1973-1990), Droppelmann fue parte del directorio de la Federación de Cooperativas Campesinas del Sur de Chile, Fecosur, organización presidida por Iván Arismendi Godoy.

En la misma época, fundaría la ONG Aurora, importante centro que facilitaba el encuentro de agrupaciones culturales, artísticas y de educación popular, que carecían de espacios para desarrollar sus actividades. Fue un importante medio de articulación para educadores populares, artesanos y el emergente mundo de la poesía y escritura.

Allí funcionó también una modesta imprenta, donde se creaba cartillas y material educativo para ser regalados a las organizaciones.

Egaña 60

En su presidencia de la actual Corporación Egaña 60, trabajó para que ese inmueble sea habilitado como un espacio destinado a actividades y encuentros con la participación de medios e instituciones del quehacer cultural, artístico, audiovisual y educativo.

En 2023, bajo la gestión de Droppelmann, ese excuartel de la PDI fue declarado Monumento Nacional y un Sitio de Memoria, dándole un importante resignificado al lugar y promoviendo los derechos humanos en la Región de Los Lagos. La placa respectiva fue instalada en julio de 2024.

El periodista y vicepresidente de la Corporación Egaña 60, Alfredo Cardemil, contó que Droppelmann siempre participó de actividades por la defensa de los derechos humanos, marcado por lo que significó haber sido prisionero político durante la dictadura.

También destacó que fue un luchador social presente en poblaciones. Lo reconoce como un líder de opinión, dirigente social y un incansable activista por los derechos humanos. "Su mayor anhelo era ver terminada la remodelación del edifico Egaña 60", admitió Cardemil.

Un mensaje

El presidente comunal del Partido Socialista (PS), Marco Dumenez, exteriorizó que "como partido reconocemos el compromiso y la incansable lucha del compañero René Droppelmann en la defensa de los derechos humanos. A pesar de haber sufrido los horrores de la dictadura, siempre compartió sus historias y anécdotas de manera especial, enseñando a las nuevas generaciones sobre lo que significó vivir un golpe de Estado".

Para Dumenez, el mensaje de Droppelmann fue claro: "Necesito que ustedes, los más jóvenes, sepan lo que pasó. Escuchen nuestros relatos para que nunca más en Chile volvamos a pasar por esto", expuso citándolo.

"Su legado permanecerá como un testimonio vivo de la lucha por la verdad y la justicia", concluyó el presidente del PS de Puerto Montt.

Cristóbal Fuenzalida, seremi de Justicia y Derechos Humanos de Los Lagos, también entregó sus condolencias expresando que "lamento profundamente el fallecimiento de un líder social de los derechos humanos en la provincia de Llanquihue, a quien tuve el honor de conocer en su calidad de presidente de la Corporación Egaña 60. Compartimos momentos importantes de trabajo y experiencias de vida por su interés de difundir los derechos humanos en la ciudad de Puerto Montt, realizando personalmente visitas guiadas en el edificio que da nombre a la organización y que sólo el viernes recién pasado compartiera en la que fuera nuestra última reunión de trabajo. Mis condolencias para su familia y a sus seres queridos".

En su memoria se oficiará una misa y despedida, programadas para las 11 horas de hoy, en la Parroquia Cristo Salvador, ubicada en calle San Antonio, en la población Techo Para Todos.

2022 fue el año en que René Droppelmann dio comienzo a las gestiones para declarar como centro de memoria el edificio de Egaña 60.

11 horas de hoy se realizará el servicio fúnebre, en la Parroquia Cristo Salvador, ubicada en la población Techo para Todos.

Cinco fueron los días en que Javiera Coña, de 29 años, se mantuvo desaparecida en Cochamó, mientras practicaba trekking.

Su familia se refirió ayer a este hecho que derivó en una amplia movilización de esfuerzos técnicos y humanos (con la participación de más de 100 personas) para dar con su paradero, lo que finalmente se logró el domingo al mediodía.

Tras ser encontrada por su hermano y un amigo, no se conoció la forma cómo la joven logró sobrevivir desde el martes, cuando se le perdió el rastro.

Matías Coña, hermano mellizo de la joven, comentó que Javiera contaba con buena implementación al momento de perderse, destacando que tenía en su poder un "buen saco para dormir, buenos zapatos, buenos pantalones, buen abrigo", además de comida como snacks, barras de cereal, agua, maní y jugos.

A pesar de disponer de esos productos, era muy probable que no sobreviviera con el paso del tiempo. Su hermano menciona que a los dos días, cuando ya no contaba con agua, Javiera tomó agua de los musgos del bosque.

Manta térmica

Sobre los días de lluvia que hubio, su hermano mayor, Ricardo Coña, destacó que ella buscó un sitio donde guarecerse y que además se cubrió con una manta térmica, la que además usó en el saco de dormir para aumentar la temperatura.

Ricardo Coña también hizo un llamado a las autoridades para instalar más señalética en el sector (La Junta) y mejorar las condiciones del lugar, pues más familias podrían verse afectadas por una nueva desaparición en esa zona cordillerana de la comuna de Cochamó.

Sus hermanos expresaron que después de haber sido dada de alta desde el Hospital de Puerto Montt, donde sólo le diagnosticaron un cuadro de deshidratación, Javiera se encuentra en buen estado de salud y estable en su domicilio, donde comparte con su familia, que había llegado desde distintos lugares para formar parte de la búsqueda.